miércoles, 2 de febrero de 2011

Valle de Pineta

A lo largo de unos 14 km de carretera, se sucede un paisaje lleno de belleza, donde  alternan espesos bosques de pinos, abetos y hayas con zonas de pastos alpinos. Es la puerta natural al Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido.


Elevando la vista, el paisaje de las cumbres hace volar la imaginación e invita a realizar ascensiones por las numerosas rutas (para los que tengan buenas piernas, que no es mi caso, por lo que no pasé de los caminos a pie de carretera, jeje).

1 comentario:

Cris dijo...

Hola despistado,
Preciosa fotografía.
El Pirineo es una maravilla en toda su extensión.
Pasar unos días por allí, sea en un punto u otro, recarga el espíritu.
De nuevo fin de semana. ¡Que lo disfrutes!.