A medio camino entre el Monasterio de Pedralbes y los jardines del palacio Real de Pedralbes, encontramos los pabellones Güell, proyectados por Gaudí entre 1884 y 1887. Se trata de un complejo formado por dos edificios unidos por una monumental puerta de hierro forjado. Actualmente es la sede de la Catedra Gaudí de la Escuela de Arquitectura.
No pudimos visitarlo porque estaba cerrado, pero la puerta con su gran dragón, ejemplo de fantasía modernista (fabricado por los herreros Vallet y Piquer) merece una mirada.
Al parque del Palacio Real podemos acceder desde la Diagonal, donde una enorme puerta de hierro forjado da paso a un gran espacio en cuyo centro apreciamos un elegante estanque ovalado presidido por un desnudo femenino de mármol Mediterrania (de Eulalia Fábregas, 1962). Detrás una cubierta de césped con laureles y naranjos y una pequeña cascada completan el conjunto.
A ambos lados del estanque empiezan los caminos en sablón que entrecruzan todo el parque; en el centro del paseo los tilos son los protagonistas.
Delante del palacio se abre una plaza circular, buen lugar para sentarse a contemplar el edificio. La plaza está presidida por una escultura de Isabel II presentando a su hijo Alfonso XII y un estanque rodeado de geranios. Actualmente alberga el Museo de Artes decorativas y el Museo de Cerámica.
