Cristal, acero, acabados en madera en suelos y paredes, largos corredores de notable altura en torno al recuperado patio del claustro, dan la mano en una modernista restauración del monasterio nuevo de San Juan de la Peña, hoy convertido en hospedería y centro de interpretación.
La fotografía inferior corresponde a una de las salas del Monasterio viejo de San Juan de la Peña, uno de los conjuntos histórico-artístico más valiosos de Aragón enclavado (y nunca mejor dicho) en pleno Pirineo.
2 comentarios:
Un tesoro histórico y espiritual en un lugar privilegiado.
Feliz fin de semana
Cristina
...dentro de poco probaré sus estancias! ...y seguro que tiro alguna foto.
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