De regreso del cañón de Anisclo me despisté con la hora y el atardecer me vino de improviso cuando alcanzaba Fanlo, localidad oscense situada entre los ríos Ara y Cinca. Es uno de los pueblos más deshabitados de la comarca (en la actualidad tiene 14 vecinos), pero es de los más bellos. Su casco urbano ofrece gran interés arquitectónico yactualmente está en avanzada estado de rehabilitación. Sólo pude captar el contraluz.
El embalse de Arguís aprovecha la Foz del río Isuela, entre las Sierras del Gratal y El águila. Es uno de los más antiguos de la región, proyectado por Francisco de Artigas, construido en 1704 y recrecido en 1929.
Una placentera y , seguramente, bien ganada siesta.