lunes, 8 de marzo de 2010

Hoy como siempre

El invierno, lenta pero inexorablemente va llegando a su fin, como siempre.



Otras cosas permanecen...



Déclaration
de Georges Moustaki

Declaro el estado de felicidad permanente
y el derecho de cada uno a todos los privilegios,
digo que el sufrimiento es sacrilegio,
cuando hay para todos rosas y pan blanco.
Discuto la legitimidad de las guerras,
la justicia que mata y la muerte que castiga,
las conciencias que duermen en el fondo de su cama,
la civilización en brazos de mercenarios.
Veo morir a este siglo que envejece.
Un mundo diferente renacerá de sus cenizas
pero simplemente no basta con esperarlo;
lo esperé demasiado. Lo quiero ahora.
Que mi mujer sea bella a cualquier hora del día
sin tener que disimularlo bajo el maquillaje
y que no se diga de dejar para más tarde
las ganas que tengo de ella y de hacerle el amor.
Que nuestros hijos sean hombres, no adultos
y que sean lo que queríamos ser antaño,
que seamos hermanos, camaradas y cómplices
en lugar de ser dos generaciones que se insultan.
Que nuestros padres puedan emanciparse por fin,
y que se tomen un tiempo para acariciar a su mujer
después de toda una vida de sudor y lágrimas
y del período entre dos guerras que no estaban en paz.
Yo declaro el estado de felicidad permanente
sin que esto sea 'palabras con música',
sin esperar que vengan tiempos mesiánicos,
sin que sea votado en ningún parlamento.
Yo digo que en lo sucesivo seremos responsables,
no daremos cuentas a nadie y a nada,
y transformaremos el azar en destino
solos a bordo y sin maestro y sin dios y sin diablo.
Y si quieres venir pasa la pasarela,
hay sitio para todos y para cada uno,
pero nos queda aún hacer el camino
para ver brillar una estrella nueva.
Yo declaro el estado de felicidad permanente...

3 comentarios:

Manuel Arribas dijo...

Pero se va rabiando con el frío que le caracteriza.
Saludos

MªTeresa Gómez Puertas dijo...

No por favor...calor no....solo calorcito.
Precioso pero utópico poema has elegido.

Vagamundos dijo...

Tantos siglos y civilizaciones cayendo en el mismo error... ¿encontraremos otro camino?