En quimper, después del incendio de 1762, que devoró todo un barrio contiguo a la catedral de Saint Corentin, se prohibió construir casas a la antigua, sobreviniendo una ola modernista en la que la piedra sustituyó a las casas de madera. La ola modernista no acabó, sin embargo, con el ambiente medieval del centro, cuyo encanto sigue casi intacto.
La punta de Raz es uno de los parajes naturales más frecuentados de Bretaña, cita privilegiada de los enamorados de las tormentas. Clasificada como paraje de interés nacional, merece la pena hacerle una visita. Es el Finisterre francés, y se llega a la punta final después de caminar durante una media hora por pistas muy fáciles. Para los más perezosos hay un autobús que te acerca, pero merece la pena hacer el trayecto a pie.
4 comentarios:
Buenisimas...ni un pero.
Me gusta la foto del faro solitario ahí en medio del mar. Un lugar muy bonito, pero parece que elegisteis un mal día para visitar la zona; lo digo por lo nublado.
....me gustan!!!, la que tocaría un poco es la del mar solitario, no sé... . Ya sabes, es mi opinión.
Gracias amigos por pasar y comentar.
El dia "peor imposible" epi, pero es lo que hay. en los viajes sale de todo y hay que intentar disfrutar de todo, incluso en la adversidad...
Gracias fernando por el consejo. La verdad es que jugué con varios revelados hasta el último momento y finalmente intente reflejar fielment lo que mis ojos veian ese dia.
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