domingo, 1 de abril de 2012

Reflejos


Yo que sentí el horror de los espejos
no sólo ante el cristal impenetrable
donde acaba y empieza, inhabitable,
un imposible espacio de reflejos

sino ante el agua especular que imita
el otro azul en su profundo cielo
que a veces raya el ilusorio vuelo
del ave inversa o que un temblor agita

Y ante la superficie silenciosa
del ébano sutil cuya tersura
repite como un sueño la blancura
de un vago mármol o una vaga rosa,

Hoy, al cabo de tantos y perplejos
años de errar bajo la varia luna,
me pregunto qué azar de la fortuna
hizo que yo temiera los espejos...
Jorge Luis Borges

3 comentarios:

Anaximandro dijo...

Bonitos reflejos en lo que parece un estanque, para ilustrar estos versos de Borges.

MªTeresa Gómez Puertas dijo...

Bonito el reflejo....a mi me gustan una barbaridad y no puedo dejar de fotografiarlos....

Despistado dijo...

Se trata del parque tío Jorge de Zaragoza.